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martes, 4 de mayo de 2010

1 de Mayo: Origen y contradicciones.


Finales del S.XIX, Chicago.

Las agrupaciones de trabajadores se esforzaban en la exigencia de una jornada laboral de 8 horas. "8 horas para el trabajo, 8 horas para el sueño, 8 horas para la casa".

En medio de un año, 1886, plagado de exigencias, 200.000 trabajadores declaran una huelga general el 1 de Mayo del mismo año.

La fabrica McCornik sacaba su producción adelante pese a llevar en huelga varios meses. Los esquiroles, hacian su trabajo.

Tercer día de concentración frente a sus puertas. Esta acaba en una autentica batalla campal donde la policía asesina de manera cobarde a 6 trabajadores en huelga.

Al día siguiente Haymarket. Trabajadores detenidos, heridos y asesinados.

A finales de Mayo y de forma progresiva se fué concediendo la jornada laboral de 8 horas. Sangre, sudor y lagrimas derramadas por obreros anarquistas y socialistas hicieron falta para ello.

En 1886, la Segunda Internacional declaró el 1 de Mayo como una jornada en apoyo a los "Martires de Chicago".

Conociendo la historia, ¿Cómo es posible que grupúsculos contra-revolucionarios de carácter fascista reclamen esta fecha como suya?¿Dónde queda la coherencia de estos partidos politicos y agrupaciones que, para ganar apoyos a toda costa, celebran un día tradicionalmente antifascista?.

¿Por qué "sindicatos" que no son más que segmentos de los altos cargos de la política actual reclaman esta fecha como suya?

Por desgracia, en la actualidad, el movimiento obrero se encuentra en un periodo de receso en cuanto a conciencia. Los trabajadores depositan su confianza en CCOO y UGT, dandose cuenta cuando la coyuntura lo permite, que estos solo han querido su dinero y su apoyo a algo ficticio. A unos sindicatos que no van a dar la cara por los trabajadores.

Para cambiar esto, hay que concienciar al movimiento obrero de estas contradicciones. Hay que impulsar el cambio acercandonos a las masas y no alejandonos de estas.

En diversas ciudades del Estado Español se han realizado bloques alternativos a las manifestaciones oficiales desde los cuales se ha denunciado la complicidad de los sindicatos vende-obreros con las instituciones. Se ha reclamado una huelga general y desde los cuales se ha hecho un llamamiento a la unidad de los trabajadores y trabajadoras contra el sindicalismo amarillo, la dictadura capitalista y sus siervos.

El 1 de Mayo, es el día del Trabajador, no el día del liberado.